El margen de un novillo es alrededor de $ 400 en 18 meses

Producir terneros es buen negocio, porque como hay muy pocos y están demandados, el criador esta pasando un buen momento. (Foto Arch.: Télam)

¿Cómo viene el negocio ganadero? Dos hechos afectan las expectativas de los productores ganaderos: por un lado, se supo que cae la producción mundial de carne producto de los altos precios de los granos. Por otro, las inundaciones en la provincia de Buenos Aires afectaron al stock presente y futuro de hacienda. El consignatario Luciano Colombo se hace eco de estas cuestiones, y, si bien admite el buen negocio que resulta la soja, asegura que criar terneros es un buen negocio y que no hay que desprenderse de los animales.

Colombo explicó a "Ondas de Campo" cómo la suba de los granos afecta el costo de producción de la carne: "En el circuito de venta que se mueve Argentina, que es alta calidad, el impacto que ha tenido la suba de los granos impacta en el costo final del producto. El maíz, con el problema de sequía de EE.UU., mermó casi el 40% su producción y la terminación de novillos en EE.UU. son todas terminaciones a feedlot, que llevan alta cantidad de granos. Esto pega en los costos de producción. Para el productor de engorde a corral es una época compleja".

"Hay otro fenómeno-prosiguió- que es la menor cantidad de terneros nacidos. Producir un ternero con espacios reducidos es cada día más caro". A nivel nacional, destaca una recuperación desde hace dos años, pero que se ve afectada por los últimos eventos climáticos: "Tuvimos un pequeño tropezón con las inundaciones. Los terneros nacen y se ahogan. La provincia está sufriendo la corrida de las aguas que desde 1983 no se daba. La Cuenca del Salado va a sufrir mucho estas pérdidas".

Aun así, remarca Colombo, "Donde no hay problemas de inundación, los campos y los pastos están muy buenos". Sin embargo, "El único producto con rentabilidad importante en el sector es la soja. El margen de un novillo es alrededor de 400 pesos en 18 meses, engordando con verdeo de invierno y pastura de verano". Por otro lado, "producir terneros es buen negocio, porque como hay muy pocos y están demandados, el criador esta pasando un buen momento. El que se desprende de las vacas, a la larga pierde".

Fuente La Voz de San Carlos