Caruso oficializó el interés de Unión
Ricardo Caruso Lombardi hizo declaraciones en radio Cooperativa y señaló que "un dirigente de Unión me mandó un mensaje, nada más. Si me llaman me sentaría a dialogar, pero tendría que arreglar cuestiones personales para irme allá", confesó. (Foto Arch.: Télam)
Más tarde, fue consultado por la actualidad del "Ciclón", que mejoró sus números: "El único cambio que hay de cuando estaba yo es Bordagaray por Jara y que están un poco mejor en lo físico. El resto está igual, a la dupla central la inventé, a Prósperi y Starcqualursi los pedí y están andando bien, el medio está igual y se da todo lo que les anuncié a los dirigentes". Y del futuro, acotó: "El campeonato que viene estará entre los tres o cinco mejores, sin dudas".
El que lo reemplazó en el cargo fue Juan Antonio Pizzi, de quien no tiene una gran referencia: "Si me hubiera llamado, no lo hubiera atendido. Porque se sentó a las 2 de la tarde cuando yo todavía no me había ido. Lo que corresponde es haber esperado, por cuestión de ética y códigos. Soy un técnico que averiguo todo y hay cosas que no se hacen". Y aseguró: "Cuando perdimos con Newell's, su representante ya había llamado a los dirigentes para ofrecerlo".
Después, dejó entrever que un colega también quiso quedarse con su lugar mientras él trabajaba en Boedo: "Otro se arrastró como una babosa, pero no tuvo quórum con la gente. Lo llamaba a Marcelo (Tinelli) todos los días y no lo nombro porque me da asco". En cuanto a la campaña de Pizzi, remarcó con una comparación con el principio de la suya: "Hizo los mismos puntos que yo, pero ahora todos dicen que es una máquina cuando a mí me mataban".
Por último, cerró el tema San Lorenzo: "Lo salvé en el peor momento de su vida, me comí toda la pretemporada sin jugadores ni amistosos, haciendo las cosas bien, y me mataron". Y antes de la despedida, lamentó las situaciones de los entrenadores de Boca y River: "Lo que le están haciendo a Falcioni es vergonzoso, lo matan en todos los programas; a Almeyda le pasó lo mismo que a mí en San Lorenzo, no le respetaron nada".
El Litoral
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