Electrodomésticos: hubo aumentos “por las dudas”, pero la situación tiende a normalizarse

En las casas de electrodomésticos hubo faltantes de algunos artículos y ya se anuncian aumentos de los bienes con componentes importados. La construcción es otro rubro en el que hay especulaciones y parálisis de las ventas.

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Desde que el gobierno nacional le dio vía libre a una virtual devaluación, los comercios de determinados rubros optaron en Santa Rosa -como en el resto del país- por diversas estrategias que les permitan observar el panorama antes de retomar la normalidad en las ventas.

La expresión “no hay precios” se volvió normal, como explicación de la disyuntiva que se genera con el nuevo precio del dólar oficial, que podría influir en los valores de determinados artículos.

Algunos comercios no tienen listas de precios vigentes, hasta saber cuál será el real impacto de las recientes definiciones. Al mismo tiempo, la situación tiende a normalizarse, al menos en lo que tiene que ver con productos tecnológicos y electrodomésticos.

Hay negocios locales que decidieron, en ese escenario, sacar de la venta algunos productos, en tanto que otros directamente se inclinaron por una remarcación “por las dudas”, aun cuando en algunos casos no existen insumos atados al precio del dólar.

En medio de ese panorama de cierta incertidumbre, se registra también la paradoja de que los clientes no sólo no dejan de comprar, sino que en algunos casos es más notable la avidez por adquirir productos tecnológicos -por ejemplo- bajo la sensación de que en las próximas semanas esos mismos bienes pueden estar más caros.

Algunas casas de electrodomésticos, especialmente las cadenas nacionales, suspendieron sus ofertas, o apelaron a estrategias de cierto ocultamiento. El lunes, la sucursal de “Garbarino” que está en La Anónima directamente cerró sus puertas.

Pero este martes la situación comenzó a normalizarse. El gobierno nacional, además, mantuvo reuniones con las grandes cadenas.

En nuestra provincia, en el caso de “Platense”, algunos de sus proveedores anunciaron que los productos con componentes importados podrían aumentar un 20 por ciento, aunque en las últimas horas las expectativas indican que ese incremento podría en realidad ser de alrededor del 12%.

Desde antes del fin de semana y hasta el lunes se notó el faltante de determinados electrodomésticos. En algún momento se suspendieron también créditos y negociaciones pendientes, pero esa situación ya volvió a la normalidad.

No sólo en el rubro tecnológico sino también en la construcción, o pinturería o ferretería la devaluación generó dudas e incrementos.

Se conoce el caso de clientes que habían reservado o pactado precios y que al ir a concretar esas operaciones se toparon con la pretención de los comerciantes de incrementar los valores tras las últimas decisiones económicas.

No muy diferente es el escenario en lo que tiene que ver con la venta de vehículos e inmuebles.

En Buenos Aires, hay negocios que han aplicado incrementos de hasta el 30 por ciento, sin justiticación.

El ministro de Economía nacional Axel Kiciloff insiste en que los comercios bajo vigilancia oficial no han puesto en vigencia aumentos. Sostiene además que la influencia de los insumos importados sólo podría registrarse en algunos sectores puntuales de la economía, y que de ningún modo pueden impulsar incrementos de ese porcentaje.

El presidente de la Cámara Argentina de la Construcción, Ricardo Girot, dice -por ejemplo- que “hasta que no se aclare la situación no hay precios de referencia. Si alguien va a comprar aberturas en estos días, lo más probable es que no se las vendan”.

Calculó que “en los próximos días habrá un panorama más claro”, aunque dio por hecho que “los precios sufrirán incrementos”. Añadió: “los productos que están fabricados a base de hierro o de aluminio son los que sufrirán los principales aumentos”.

El Diario LP