¿Qué puedo hacer si mi perro es agresivo?

Estos consejos te serán de gran utilidad si tu perro tiene algún tipo de comportamiento agresivo, ya sean sus gruñidos al intentar coger su plato de comida para llenarlo o si quiere morder a otros animales. Sólo continúa leyendo.

Si además de leer los consejos, los pones en práctica verás que tu perro se vuelve fiel, dócil, y nada agresivo, con lo que tus preocupaciones desaparecerán por fin.

Con estos pasos podrás tener el control de esas maneras agresivas de tu perro antes de que no tenga solución. Tienes que terminar con los malos hábitos y el mal comportamiento, no dejes que se ponga agresivo, haz que sea el perro ideal tan tranquilo y amigable.

Con estos pasos un 82% de estos perros que se han mostrado agresivos, dejan esta actitud y jamás vuelven a tener ningún tipo de señal violenta ni con personas, animales, tampoco con los objetos. El por ciento restante que no mejora su actitud está demostrado que es por motivos físicos, ya sean dolores insoportables, esquizofrenia o un mal psicológico.

No te preocupes, ahora mismo te dejo los consejos. Esto es lo primero que debes saber:

Debes ser el líder.

De seguro te suena muy extraño. ¿Alguna vez has oído el “alfa” en una “manada”? De no ser así tal vez sea esto lo que ha provocado dicha agresividad. ¿Te gustaría saber por qué? Si no eres su líder, tu perro es quien ha tomado esa posición y espera que hagas lo que él quiera, si no le obedeces él se mostrara dominante, es decir… agresivo.

Esto es lo que pasa en un alto por ciento de los casos con la agresividad canina. Que el perro domine.

Y lo ideal y necesario para acabar con la agresividad en tu perro, es ser el líder. Aquí mismo te voy a poner lo necesario para enfrentarte a esta situación.

Lo primero de todo es saber la raíz del problema. ¿Qué es lo que pone agresivo a tu perro? Si es dominación son pequeñas cosas como: Mirarle a los ojos con fijeza. Ponerte cerca de su comida. Tocar sus juguetes…

Para terminar con esto tienes que ser consciente de todas las situaciones y evitarlo en mayor medida. Evita la agresividad lo máximo posible, evade esas situaciones que causan esta agresividad. De ese modo tu mascota tendrá un estado más estable y podrás pasar al siguiente nivel, que es el vital.

Su educación y adiestramiento.

Esta es la clave para que tu perro sepa que tú eres quien manda, que tú eres el líder y tu perro es quien debe obedecer, el seguidor. 

 

Comienza cuanto antes este plan de obediencia, que tu perro sepa su lugar en la pequeña manada. Tú debes ser quien conceda los permisos y lo que debe hacer, no es él quien hace lo que quiere cuando quiera.

Lo ideal es que cuando tu perro haga lo adecuado, le compenses con un premio. Enséñale habilidades y trucos durante un tiempo de diez minutos, dale una golosina cuando te obedezca, cuando cumpla tus órdenes. Aunque su obediencia sea sólo para ser premiado, es algo beneficioso. 

 

¿Por qué? Porque tu perro entiende que eres tu quien manda y te obedecerá porque de este modo obtiene algo que le favorece. Lo ideal es que empieces ya. Comienza en este mismo momento a educarlo. Enséñale los trucos, hazle saber que podrá tener beneficios si se comporta como deseas. Nunca le des la comida cuando él te la exija, sólo cuando realmente lo merezca, no le dejes dormir en tu cama porque allí descansas tú y nunca te dejes llevar por su voluntad.

Con estos consejos puedes controlar su agresividad, puedes cambiar el comportamiento de tu mascota, disfrutando por fin de su compañía tranquila y dócil, un animal de compañía.

 

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