La Gloria | Denuncian intento de desalojo de un anciano ranquel de 81 años
https://www.lapampadiaxdia.com.ar/2014/03/la-gloria-denuncian-intento-de-desalojo.html
Un conocido puntero del PJ y miembro de la Asamblea Permanente de los Derechos Humanos usurpó un lote y pretende desalojar a un anciano ranquel, de 81 años, que vive en esa quinta de La Gloria hace veinte años, dedicado a su huerta y los frutales, según denunció este sábado el Consejo de Lonkos, familiares y amigos. (Foto El Diario LP)
Un grupo de familiares, amigos y miembros del Consejo de Lonkos de la provincia, se reunió este sábado a la mañan en La Gloria, en la quinta de Baldomero Blanco, un aborigen ranquel de 81 años que vive hace dos décadas allí, para expresarle su apoyo, denunciar y resistir el intento de usurpación de su propiedad.
Blanco está jubilado y vive solo en cuatro lotes, a las afueras del poblado ubicado a la vera de la ruta 5, entre Lonquimay y Uriburu. Tiene una casa precaria que levantó con sus propias manos hace dos década, hace huerta y cuida frutales. Este sábado recibió la visita de una de sus hijas y la esposa -viven en Santa Rosa-, de amigos y el jefe del Consejo de Lonkos, Fermín Acuña, junto a otros integrantes de esa agrupación.
“Venimos a defender las tierras de Baldomero”, le dijo a El Diario el docente Mauro Aromando, que lo conoce desde hace muchos años, cuando él hizo una experincia productiva en la zona.
En abril se cumplen veinte años de que Blanco ocupó los lotes y levantó una casa precaria, dónde vive. Se dedica a la huerta y los frutales, vende las hortalizas en el pueblo. Pero la vida apacible de Baldomero se transformó hace un mes. Según contaron, en ese momento apareció una persona con maquinarias y le usurpó uno de lo cuatro lotes.
El usurpador es un personaje conocido en Santa Rosa, Omar Roque Medina, uno de los punteros del PJ que tenía cercanía con la presidenta del Consejo de Unidades Básicas de Santa Rosa en la década del ‘90, Elsa Labegorra, y actual secretario de la Asamblea Permanente en Defensa de los Derechos Humanos, que encabeza el kirchnerista Mario Canoba. También es vicepresidente de la unidad básica de Colonia Escalante.
Medina ocupó un lote, trajo maquinarias, limpió el terreno, comenzó con trabajos de cercamiento y realizó una declaración de ocupación en Catastro, según los amigos, “en connivencia” con el intendente de Uriburu, el justicialista Roberto Gómez. Y comenzó a amenazarlo para que abandone su casa y le ceda el resto de los lotes.
El año pasado el intendente de Uriburu ya le había advertido a Blanco que había aparecido una persona que reclamaba la propiedad. “El le contestó que no podía ser que tengan la escritura, porque los que eran dueños se han muerto todos hace muchos años, pero que si le demostraban la propiedad no había problema... aunque sabe que él es el propietario, está ocupando hace veinte años y la ley lo ampara”, dijo Aromando que fue la respuesta del anciano.
“El tiene una exposición en la policía, la hizo cuando ocupó el lugar. Tiene ese documento y fue pagando impuestos en Rentas, tiene todos los pagos de esos impuestos. Pero, lo más importante, hay testigos de que él está hace veinte años”, remarcó. El domingo pasado hubo una reunión en el pueblo por este tema. “La gente que asistió lo apoya. Todos sabemos que está hace muchos años, toda su vida la tiene ahí”, dijo.
La situación se puso más tensa desde hace un mes, cuando apareció Medina con las máquinas y arrasó un lote que Blanco había dejado en descanso, no estaba trabajando, aunque si tenía algunos frutales. “Ahora le quiere sacar la casa y el otro terreno, donde construyó un invernadero que, le dijo, tiene que desarmarlo”, contó el docente.
Medina hizo una exposición en la comisaría, hace unos días, en la cual menciona que Blanco lo increpó cuando él le pidió que desalojara los lotes. Y no dejó de mostrarse y presionar al anciano con actitudes desafiantes. Este sábado, mientras los amigos y vecinos de Blanco se manifestaron frente a su casa, dónde colocaron una bandera del Consejo de Lonkos, Medina permanecía en el lote aledaño.
El de Blanco no parece ser el único problema con la regularización de la propiedad de la tierra en La Gloria. Desde hace unos años hay un negocio inmobiliario en la zona, se han puesto en venta terrenos y hay demanda de personas que buscan lugares más tranquilos, dónde desarrollar un vida naturista o ecológica.
A partir de esa situación, algunas familias que hace más de veinte años que ocupan su predio pero no tienen escritura, han intentado iniciar los trámites con agrimensores, pero en el municipio de Uriburu “le dan vueltas” para demorar las gestiones, según relataron. “Aca hay algo raro”, sospechan en el pueblo.
En La Gloria ofrecen terrenos a la venta en la actualidad. Según dijeron, se ofrecen a 50 mil pesos y hay disponibilidad. “Si Medina fuera una buena persona, hubiera venido y compraba un terreno y no venía a ocupar de prepo un terreno con posesión”, dijeron este sábado.
“Baldomero es un de los primeros que vino a La Gloria cuando no había nadie. Es uno de los iniciadores de la repoblación del pueblo, cuando todavía no se había dado este fenómeno de empezar a construír aca. Ya hae quince años hubo una movida de empezar a construír, en algún momento se paralizó y en los últimos años volvió a resurgir esto de invertir en los lotes”, explicó Aromando.
Blanco tiene 81 años y nació en Colonia Emilio Mitre. Sus padres eran aborígenes, ranqueles. Casi analfabeo, conserva gran parte de su cultura de origen y se reivindica como aborigen.
Un grupo de familiares, amigos y miembros del Consejo de Lonkos de la provincia, se reunió este sábado a la mañan en La Gloria, en la quinta de Baldomero Blanco, un aborigen ranquel de 81 años que vive hace dos décadas allí, para expresarle su apoyo, denunciar y resistir el intento de usurpación de su propiedad.
Blanco está jubilado y vive solo en cuatro lotes, a las afueras del poblado ubicado a la vera de la ruta 5, entre Lonquimay y Uriburu. Tiene una casa precaria que levantó con sus propias manos hace dos década, hace huerta y cuida frutales. Este sábado recibió la visita de una de sus hijas y la esposa -viven en Santa Rosa-, de amigos y el jefe del Consejo de Lonkos, Fermín Acuña, junto a otros integrantes de esa agrupación.
“Venimos a defender las tierras de Baldomero”, le dijo a El Diario el docente Mauro Aromando, que lo conoce desde hace muchos años, cuando él hizo una experincia productiva en la zona.
En abril se cumplen veinte años de que Blanco ocupó los lotes y levantó una casa precaria, dónde vive. Se dedica a la huerta y los frutales, vende las hortalizas en el pueblo. Pero la vida apacible de Baldomero se transformó hace un mes. Según contaron, en ese momento apareció una persona con maquinarias y le usurpó uno de lo cuatro lotes.
El usurpador es un personaje conocido en Santa Rosa, Omar Roque Medina, uno de los punteros del PJ que tenía cercanía con la presidenta del Consejo de Unidades Básicas de Santa Rosa en la década del ‘90, Elsa Labegorra, y actual secretario de la Asamblea Permanente en Defensa de los Derechos Humanos, que encabeza el kirchnerista Mario Canoba. También es vicepresidente de la unidad básica de Colonia Escalante.
Medina ocupó un lote, trajo maquinarias, limpió el terreno, comenzó con trabajos de cercamiento y realizó una declaración de ocupación en Catastro, según los amigos, “en connivencia” con el intendente de Uriburu, el justicialista Roberto Gómez. Y comenzó a amenazarlo para que abandone su casa y le ceda el resto de los lotes.
El año pasado el intendente de Uriburu ya le había advertido a Blanco que había aparecido una persona que reclamaba la propiedad. “El le contestó que no podía ser que tengan la escritura, porque los que eran dueños se han muerto todos hace muchos años, pero que si le demostraban la propiedad no había problema... aunque sabe que él es el propietario, está ocupando hace veinte años y la ley lo ampara”, dijo Aromando que fue la respuesta del anciano.
“El tiene una exposición en la policía, la hizo cuando ocupó el lugar. Tiene ese documento y fue pagando impuestos en Rentas, tiene todos los pagos de esos impuestos. Pero, lo más importante, hay testigos de que él está hace veinte años”, remarcó. El domingo pasado hubo una reunión en el pueblo por este tema. “La gente que asistió lo apoya. Todos sabemos que está hace muchos años, toda su vida la tiene ahí”, dijo.
La situación se puso más tensa desde hace un mes, cuando apareció Medina con las máquinas y arrasó un lote que Blanco había dejado en descanso, no estaba trabajando, aunque si tenía algunos frutales. “Ahora le quiere sacar la casa y el otro terreno, donde construyó un invernadero que, le dijo, tiene que desarmarlo”, contó el docente.
Medina hizo una exposición en la comisaría, hace unos días, en la cual menciona que Blanco lo increpó cuando él le pidió que desalojara los lotes. Y no dejó de mostrarse y presionar al anciano con actitudes desafiantes. Este sábado, mientras los amigos y vecinos de Blanco se manifestaron frente a su casa, dónde colocaron una bandera del Consejo de Lonkos, Medina permanecía en el lote aledaño.
El de Blanco no parece ser el único problema con la regularización de la propiedad de la tierra en La Gloria. Desde hace unos años hay un negocio inmobiliario en la zona, se han puesto en venta terrenos y hay demanda de personas que buscan lugares más tranquilos, dónde desarrollar un vida naturista o ecológica.
A partir de esa situación, algunas familias que hace más de veinte años que ocupan su predio pero no tienen escritura, han intentado iniciar los trámites con agrimensores, pero en el municipio de Uriburu “le dan vueltas” para demorar las gestiones, según relataron. “Aca hay algo raro”, sospechan en el pueblo.
En La Gloria ofrecen terrenos a la venta en la actualidad. Según dijeron, se ofrecen a 50 mil pesos y hay disponibilidad. “Si Medina fuera una buena persona, hubiera venido y compraba un terreno y no venía a ocupar de prepo un terreno con posesión”, dijeron este sábado.
“Baldomero es un de los primeros que vino a La Gloria cuando no había nadie. Es uno de los iniciadores de la repoblación del pueblo, cuando todavía no se había dado este fenómeno de empezar a construír aca. Ya hae quince años hubo una movida de empezar a construír, en algún momento se paralizó y en los últimos años volvió a resurgir esto de invertir en los lotes”, explicó Aromando.
Blanco tiene 81 años y nació en Colonia Emilio Mitre. Sus padres eran aborígenes, ranqueles. Casi analfabeo, conserva gran parte de su cultura de origen y se reivindica como aborigen.
El Diario LP
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