Santa Fe | Encuentran a novio desaparecido a pocas horas de su boda

| ESCUCHÁ LOS AUDIOS | Fernando había desaparecido el sábado, el día de la boda. Fue hallado sano y salvo en un hotel de Rosario, según lo dicho a Cadena 3 por su novia. La principal hipótesis es que se habría gastado el dinero con el que debía pagar la fiesta.

Encontraron sano y salvo ayer al joven Fernando Marengo, de 29 años, quien había desaparecido el sábado a la mañana, horas antes de contraer matrimonio.

Su novia, Virginia Taborda, contó a Cadena 3 que su prometido estaba en un hotel de la ciudad de Rosario, cerca de la terminal de ómnibus.

La principal hipótesis es que el joven se habría gastado el dinero con el que debía pagar la fiesta y que, asustado, decidió irse.

Fernando Marengo había sido visto por última vez el sábado a la mañana en la zona de la terminal de ómnibus de Santa Fe. Pero, su novia, Virginia Taborda, había asegurado que el joven no tenía nada que hacer allí, sino que debía ir a pagar la mesa dulce de la boda.

Liliana, madre del muchacho, había expresado, angustiada, a Cadena 3: “No me importan los motivos: que vuelva, que nos mande un mensaje. No comemos, no dormimos”.

“Todos lo estamos esperando. Si cometió un error, que vuelva, que lo vamos a perdonar”, exclamó.

La palabra del Novio Fugitivo

 “No me di cuenta de la magnitud de la situación, no lo hice adrede”. El novio fugitivo que tuvo en vilo a su familia y a la ciudad de Santa Fe apareció ayer y, según contó su papá, se había escapado el día del casamiento porque no tenía plata para terminar de pagar los gastos de la fiesta.

Ahora, en un diálogo con el noticiero Arriba Argentinos, dio la cara: relató lo ocurrido y se hizo cargo de su inoportuna decisión. “A Virginia le pedí disculpas, no tenía plata y me asusté”, fue una de las primeras frases que arrojó en la entrevista. “Salí de mi casa el sábado con la idea de irme, hice mal las cosas yo”, agregó.

Fernando Marengo, de 29 años, se levantó el día de su boda y decidió fugarse. No sabía muy bien adónde, pero cuando fue a pagar el catering a la esquina de la terminal, se subió a un colectivo con destino a Rosario. “Fue lo primero que se me ocurrió, ahora me voy cuenta que está mal”, reflexionó, y negó las versiones que aseguraban que exparejas de su prometida lo habían amenazado de muerte.

Finalmente, un amigo de Marengo lo encontró en un hotel de Rosario porque un primo del joven se lo cruzó en la calle. La Policía no lo había podido localizar. Las cámaras de seguridad tampoco lo habían capturado y tenía el celular apagado.

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