Ganadería | Neosporosis Bovina: La enfermedad del aborto bovino en tambos
https://www.lapampadiaxdia.com.ar/2014/11/ganaderia-neosporosis-bovina-la.html
"Es una enfermedad parasitaria reconocida como una de las principales causas de aborto bovino", en el mundo incluyendo la Argentina", explicó el Inta. Si bien afecta principalmente a los animales del tambo, no quedan excluídos de contagio el resto de las producciones. (Foto: @n_bertin)
La Estación Experimental Cuenca del Salado del INTA realizó un extenso informe sobre esta enfermedad que afecta seriamente a la cría de ganados, en especial a la raza Holando. El problema principal que presenta la enfermedad es que el único signo clínico que presenta es el aborto, que se produce entre el tercer y noveno mes de gestación, lo cual dificulta un diagnóstico del cuadro a tiempo. En el estudio que realizaron comprobaron que la "intensidad de la explotación" no es una determinante para que la enfermedad este o no presente.
"El aborto bovino debe ser evaluado como un síndrome donde se relacionan un conjunto de fenómenos para producir la muerte fetal. Existe una gran variedad de mecanismos causales, los cuales pueden actuar en forma independiente o estar relacionados. La interpretación de la información relevante asi como también el diagnóstico y descarte de otras causas posibles son elementos claves a la hora de definir la etiología del aborto", informó la Estación Experimental Cuenca del Salado del INTA.
Es una enfermedad parasitaria reconocida como una de las principales causas de aborto bovino en el mundo incluyendo la Argentina. Esta enfermedad que afecta con mayor frecuencia a las vacas de tambo, también ocasiona trastornos en la gestación del ganado de carne y en otras especies animales. En las vacas infectadas el único signo clínico observado es el aborto, que se produce entre el tercer y noveno mes de gestación.
En cuanto a la transmisión de la neosporosis existen dos rutas de contagio. La forma vertical o transplacentaria, es la que se produce con mayor frecuencia y se da a partir de la reactivación del parasito al momento de la gestación. La forma horizontal se produce tras la ingestión de ooquistes (pequeños parásitos internos de los perros) que contaminan el agua y el alimento del ganado.
Para el diagnóstico existen herramientas de laboratorio que junto con el critério del médico veterinario permiten arrivar determinar la presencia de la enfermedad, al tiempo que se descarten otras posibles causas de aborto.
Los análisis serológicos permiten determinar en el suero de un animal la presencia de anticuerpos contra una enfermedad específica. Estas técnicas pueden ser utilizadas para complementar el diagnóstico y conocer el número de animales infectados, y asi poder evaluar la necesidad de implementar medidas de control.
Con el objetivo de evaluar la seroprevalencia y la frecuencia de seroconversión en bovinos de cría con tres niveles de carga animal, profesionales de la Estación Experimental Cuenca del Salado del INTA realizaron un estudio en la región. Para el seguimiento se observaron 3 sistemas de explotación con diferentes grados de intensificación.
Para el seguimiento se seleccionaron al azar 80 vientres pertenecientes a 3 rodeos con distinta carga. Un rodeo intensivo con 2 vacas/ha, otro semintensivo 1.1 vaca/ha y un tercero con carga tradicional 0.75 vaca/ha.
Según explican los técnicos del INTA "los resultados reflejaron que no existieron diferencias significativas (P> 0.05) en los porcentajes de prevalencia a N. caninum entre los animales de los diferentes sistemas para cada categoría en el período en estudio (8 meses)". En los tres rodeos habia al menos un animal postitivo a la enfermedad y la seroprevalencia promedio en vacas multiparas fue del 4.2 %, coincidiendo con los valores promedios hallados en otros estudios realizados en la provincia de Buenos Aires. A su vez se observó que "la prescencia de animales infectados no implicó la presentación clínica de la enfermedad".
Los profesionales del INTA indican que "las medidas de control deben ser establecidas en forma individual para cada establecimiento y bajo criterio del profecional".
La decisión de implementar distintas estrategias estrarán sujetas a una evaluación global que conforma el diagnóstico, el análisis epidemiologico y a la relación costo beneficio. Estas "tendrán como objetivo evitar los episodios de abortos y en caso de ser necesario disminuir el número de animales infectados".
Entre las acciones a impulsar los técnicos destacan la importancia de "definir si la enfermedad esta presente y si es la causa de aborto, dándole la importancia necesaria". "Evaluar la prevalencia en las distintas categorías, tratar de determinar la forma de transmisión mas frecuente, evitar reponer con vaquillonas seropositivas, utilizar vacunas en caso de estar disponibles en el mercado, y evitar el acceso de perros".
Infocampo
La Estación Experimental Cuenca del Salado del INTA realizó un extenso informe sobre esta enfermedad que afecta seriamente a la cría de ganados, en especial a la raza Holando. El problema principal que presenta la enfermedad es que el único signo clínico que presenta es el aborto, que se produce entre el tercer y noveno mes de gestación, lo cual dificulta un diagnóstico del cuadro a tiempo. En el estudio que realizaron comprobaron que la "intensidad de la explotación" no es una determinante para que la enfermedad este o no presente.
"El aborto bovino debe ser evaluado como un síndrome donde se relacionan un conjunto de fenómenos para producir la muerte fetal. Existe una gran variedad de mecanismos causales, los cuales pueden actuar en forma independiente o estar relacionados. La interpretación de la información relevante asi como también el diagnóstico y descarte de otras causas posibles son elementos claves a la hora de definir la etiología del aborto", informó la Estación Experimental Cuenca del Salado del INTA.
Es una enfermedad parasitaria reconocida como una de las principales causas de aborto bovino en el mundo incluyendo la Argentina. Esta enfermedad que afecta con mayor frecuencia a las vacas de tambo, también ocasiona trastornos en la gestación del ganado de carne y en otras especies animales. En las vacas infectadas el único signo clínico observado es el aborto, que se produce entre el tercer y noveno mes de gestación.
En cuanto a la transmisión de la neosporosis existen dos rutas de contagio. La forma vertical o transplacentaria, es la que se produce con mayor frecuencia y se da a partir de la reactivación del parasito al momento de la gestación. La forma horizontal se produce tras la ingestión de ooquistes (pequeños parásitos internos de los perros) que contaminan el agua y el alimento del ganado.
Para el diagnóstico existen herramientas de laboratorio que junto con el critério del médico veterinario permiten arrivar determinar la presencia de la enfermedad, al tiempo que se descarten otras posibles causas de aborto.
Los análisis serológicos permiten determinar en el suero de un animal la presencia de anticuerpos contra una enfermedad específica. Estas técnicas pueden ser utilizadas para complementar el diagnóstico y conocer el número de animales infectados, y asi poder evaluar la necesidad de implementar medidas de control.
Por el campo:
Con el objetivo de evaluar la seroprevalencia y la frecuencia de seroconversión en bovinos de cría con tres niveles de carga animal, profesionales de la Estación Experimental Cuenca del Salado del INTA realizaron un estudio en la región. Para el seguimiento se observaron 3 sistemas de explotación con diferentes grados de intensificación.
Para el seguimiento se seleccionaron al azar 80 vientres pertenecientes a 3 rodeos con distinta carga. Un rodeo intensivo con 2 vacas/ha, otro semintensivo 1.1 vaca/ha y un tercero con carga tradicional 0.75 vaca/ha.
Según explican los técnicos del INTA "los resultados reflejaron que no existieron diferencias significativas (P> 0.05) en los porcentajes de prevalencia a N. caninum entre los animales de los diferentes sistemas para cada categoría en el período en estudio (8 meses)". En los tres rodeos habia al menos un animal postitivo a la enfermedad y la seroprevalencia promedio en vacas multiparas fue del 4.2 %, coincidiendo con los valores promedios hallados en otros estudios realizados en la provincia de Buenos Aires. A su vez se observó que "la prescencia de animales infectados no implicó la presentación clínica de la enfermedad".
Más vale prevenir:
Los profesionales del INTA indican que "las medidas de control deben ser establecidas en forma individual para cada establecimiento y bajo criterio del profecional".
La decisión de implementar distintas estrategias estrarán sujetas a una evaluación global que conforma el diagnóstico, el análisis epidemiologico y a la relación costo beneficio. Estas "tendrán como objetivo evitar los episodios de abortos y en caso de ser necesario disminuir el número de animales infectados".
Entre las acciones a impulsar los técnicos destacan la importancia de "definir si la enfermedad esta presente y si es la causa de aborto, dándole la importancia necesaria". "Evaluar la prevalencia en las distintas categorías, tratar de determinar la forma de transmisión mas frecuente, evitar reponer con vaquillonas seropositivas, utilizar vacunas en caso de estar disponibles en el mercado, y evitar el acceso de perros".
Infocampo
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