Provinciales | BLP renovará cajeros y abrirá nuevas sucursales
https://www.lapampadiaxdia.com.ar/2015/02/provinciales-blp-renovara-cajeros-y.html
La posibilidad de colocar más cajeros automáticos está limitada por la importación y el alto costo de reposición de billetes. La creación de sucursales en los barrios nuevos de Santa Rosa y General Pico está en mente para este año.
El Banco de La Pampa tiene proyectos para ampliar este año su dotación de cajeros automáticos, renovar los edificios de varias sucursales y encarar la construcción de nuevas agencias.
El Banco de La Pampa tiene proyectos para ampliar este año su dotación de cajeros automáticos, renovar los edificios de varias sucursales y encarar la construcción de nuevas agencias.
El plan contempla la sede propia para la agencia de Casa de Gobierno y abrir sucursales en los nuevos barrios de Santa Rosa y General Pico. También incorporar nuevas bocas de la red Pampa Pagos, tanto en Santa Rosa como en el interior de la provincia.
"En el Banco tenemos un plan de mejoramiento permanente de la infraestructura, tanto la que hay en la provincia como en las provincias vecinas", explicó el representante del capital estatal en el Directorio del Banco de La Pampa, Wálter Faccipieri. "Es un plan que vamos elaborando con números en la mano, en función de las necesidades reales", acotó.
Uno de los temas "calientes" es el de los cajeros automáticos, un sistema de extracción de dinero que presenta una demanda constante y creciente. En el caso del BLP, su red comprende unos 100 cajeros automáticos. Durante 2014 estos cajeros entregaron unos 5 millones de billetes, 1.300.000 billetes más que el año anterior.
"El problema con los cajeros es que son como los autos: son fierros que se rompen y hay que repararlos, y cuanto más viejos, más se rompen", explicó Faccipieri. "Indudablemente hay que cambiarlos y en eso estamos, pero el problema que tenemos ahora es con la importación, que está un poco complicada".
La cuestión no es comprar cualquier marca sino aquellas que han resultado más eficientes y que la gente usa más. "Está complicado conseguir cajeros", reiteró.
Ante esa entrada a cuenta gotas de nuevos equipos, la política del Banco de La Pampa es mantener la calidad de los que ya están y después analizar la posibilidad de instalar nuevos cajeros en la ciudad. "Apuntamos a mejorar los que ya están habilitados. Cuando vienen equipos nuevos, preferimos reemplazar aquellos que están más viejitos y que son los que se rompen más seguido", señaló del director.
Tanto Faccipieri como el resto de los directores del BLP -tanto oficiales como privados- recibe cada mañana un informe de funcionamiento de la red de cajeros. "Es un informe muy preciso que nos indica cuánto tiempo estuvieron en uso y cuánto fuera de servicio, sea por roturas, falta de dinero o algún otro problema".
En este momento, ese porcentaje de efectividad está en un 90 por ciento, un valor que si bien es alto, el Banco quiere mejorar. "En algún momento estuvimos en el 95 por ciento pero bajamos un poco por esta cuestión de que se rompen muy seguido. Este año vamos a trabajar en volver a ese 95 por ciento", anticipó.
A título ilustrativo Faccipieri comentó que cada cajero realiza en promedio entre 10.000 y 12.000 operaciones al mes, mientras que en los más utilizados esa demanda sube a las 14.000 operaciones mensuales. Los más utilizados son, por ese motivo, los que se rompen más seguido y generan más quejas contra el Banco.
El valor de compra de un cajero automático está en unos 20.000 dólares más los gastos complementarios para colocarlo. "El problema real no es el costo del cajero sino el abastecimiento de billetes", indicó Faccipieri. El Banco Central obliga a contratar servicios privados para esta tarea y esa es la parte más onerosa del asunto. "El costo operativo de los cajeros automáticos es alto, y eso obliga a estudiar bien en dónde se va colocar un nuevo cajero", remarcó.
La red de cajeros se va a seguir ampliando, anticipó Faccipieri, pero "en forma gradual", aclaró. "Si empezamos a colocar un cajero atrás de otro, el costo de mantenimiento va a ser muy alto y la rentabilidad se va achicar mucho o vamos a entrar en pérdida".
En la actualidad se dan situaciones que el Banco quiere equilibrar: hay localidades de 500 habitantes que tienen un cajero automático y otras de 2.000 que no. "Por eso, con números en la mano y no por amiguismo vamos a ver cuáles son las localidades que vamos a priorizar este año".
Las mismas prevenciones se aplican para abrir nuevas ventanillas de cobro y pago. "Tenemos un cronograma de obras que se aprueba de acuerdo a las posibilidades del Banco", comentó Faccipieri. Abrir una nueva sucursal tiene sus complejidades por los requisitos de cumplimiento obligatorio que tiene el propio BLP y aquellos que impone el Banco Central de la República Argentina. "Por ejemplo, tenemos que llegar con la fibra óptica y tiene que haber una comisaría cerca", señaló el gerente para ejemplificar dos requisitos ineludibles. "Hay que cumplir con factores técnicos y de seguridad".
El plan de obras para 2015 contempla la sede propia para la agencia de Casa de Gobierno y una importante ampliación a la agencia del Barrio Butaló. En el caso de Casa de Gobierno, el edificio estaría entre la Biblioteca Legislativa y la propia Casa de Gobierno. Esta obra es prioritaria por el nivel de operaciones que tiene en la actualidad.
En el barrio Butaló se prevén ampliaciones tanto edilicias como en la dotación de cajeros automáticos. Esta es otra sede que quedó chica ante el crecimiento de la ciudad y de la demanda de los clientes.
"Además estamos monitoreando permanentemente el crecimiento de la ciudad y la necesidad de abrir nuevas sucursales. Es algo que tenemos muy presente", remarcó.
-¿Podemos pensar en nuevas sucursales en los barrios nuevos de Santa Rosa?
-Si, totalmente, es una posibilidad. En Santa Rosa y en General Pico. Es un tema que está bajo constante análisis.
El sistema de cobro de servicios "Pampa Pagos" dio un excelente resultado y es otra fuerte línea de acción del Banco de La Pampa. "Vamos de a poco porque queremos hacer las cosas bien", explicó Faccipieri. La incorporación de nuevas bocas, tanto en Santa Rosa como en el interior, "es permanente" pero no masiva, aclaró. "Si abrís muchos y empieza a haber uno cerca del otro, no le conviene a nadie", señaló.
La intención es que cada barrio tenga un Pampa Pagos y lo mismo cada localidad. A la hora de buscar nuevas bocas, se presta atención a la cercanía con los ya existentes y a la estructura de empleados que ya tiene ese comercio. "Al comercio le queda una ganancia pero no alcanza para que contrate empleados solo para atender Pampa Pagos. Por eso buscamos comercios que ya tienen una estructura armada".
Este sistema es gerenciado por el Banco de la Provincia de Buenos Aires, Bapro, y consiste en una red que se amplía en forma constante en cuanto a bocas como a servicios. Para utilizar la red, el Banco de La Pampa le paga un porcentaje de cada transacción al Bapro. Otra parte queda para el comercio.
"El objetivo que se planteó el Banco de La Pampa cuando comenzamos con los Pampa Pagos no fue ganar dinero sino quedar hechos, porque lo que nos interesaba era descomprimir nuestras sucursales", indicó. La meta se ha cumplido con creces desde el momento en que de los 400.000 comprobantes mensuales que tiene el BLP, 100.000 se hacen por ventanilla y los 300.000 restantes se distribuyen entre los sistemas de Homebanking, Interbanking y Pampa Pagos.
La Arena
"En el Banco tenemos un plan de mejoramiento permanente de la infraestructura, tanto la que hay en la provincia como en las provincias vecinas", explicó el representante del capital estatal en el Directorio del Banco de La Pampa, Wálter Faccipieri. "Es un plan que vamos elaborando con números en la mano, en función de las necesidades reales", acotó.
Uno de los temas "calientes" es el de los cajeros automáticos, un sistema de extracción de dinero que presenta una demanda constante y creciente. En el caso del BLP, su red comprende unos 100 cajeros automáticos. Durante 2014 estos cajeros entregaron unos 5 millones de billetes, 1.300.000 billetes más que el año anterior.
"El problema con los cajeros es que son como los autos: son fierros que se rompen y hay que repararlos, y cuanto más viejos, más se rompen", explicó Faccipieri. "Indudablemente hay que cambiarlos y en eso estamos, pero el problema que tenemos ahora es con la importación, que está un poco complicada".
La cuestión no es comprar cualquier marca sino aquellas que han resultado más eficientes y que la gente usa más. "Está complicado conseguir cajeros", reiteró.
Ante esa entrada a cuenta gotas de nuevos equipos, la política del Banco de La Pampa es mantener la calidad de los que ya están y después analizar la posibilidad de instalar nuevos cajeros en la ciudad. "Apuntamos a mejorar los que ya están habilitados. Cuando vienen equipos nuevos, preferimos reemplazar aquellos que están más viejitos y que son los que se rompen más seguido", señaló del director.
Al 95 por ciento.
Tanto Faccipieri como el resto de los directores del BLP -tanto oficiales como privados- recibe cada mañana un informe de funcionamiento de la red de cajeros. "Es un informe muy preciso que nos indica cuánto tiempo estuvieron en uso y cuánto fuera de servicio, sea por roturas, falta de dinero o algún otro problema".
En este momento, ese porcentaje de efectividad está en un 90 por ciento, un valor que si bien es alto, el Banco quiere mejorar. "En algún momento estuvimos en el 95 por ciento pero bajamos un poco por esta cuestión de que se rompen muy seguido. Este año vamos a trabajar en volver a ese 95 por ciento", anticipó.
A título ilustrativo Faccipieri comentó que cada cajero realiza en promedio entre 10.000 y 12.000 operaciones al mes, mientras que en los más utilizados esa demanda sube a las 14.000 operaciones mensuales. Los más utilizados son, por ese motivo, los que se rompen más seguido y generan más quejas contra el Banco.
Abastecimiento.
El valor de compra de un cajero automático está en unos 20.000 dólares más los gastos complementarios para colocarlo. "El problema real no es el costo del cajero sino el abastecimiento de billetes", indicó Faccipieri. El Banco Central obliga a contratar servicios privados para esta tarea y esa es la parte más onerosa del asunto. "El costo operativo de los cajeros automáticos es alto, y eso obliga a estudiar bien en dónde se va colocar un nuevo cajero", remarcó.
La red de cajeros se va a seguir ampliando, anticipó Faccipieri, pero "en forma gradual", aclaró. "Si empezamos a colocar un cajero atrás de otro, el costo de mantenimiento va a ser muy alto y la rentabilidad se va achicar mucho o vamos a entrar en pérdida".
En la actualidad se dan situaciones que el Banco quiere equilibrar: hay localidades de 500 habitantes que tienen un cajero automático y otras de 2.000 que no. "Por eso, con números en la mano y no por amiguismo vamos a ver cuáles son las localidades que vamos a priorizar este año".
Ventanillas.
Las mismas prevenciones se aplican para abrir nuevas ventanillas de cobro y pago. "Tenemos un cronograma de obras que se aprueba de acuerdo a las posibilidades del Banco", comentó Faccipieri. Abrir una nueva sucursal tiene sus complejidades por los requisitos de cumplimiento obligatorio que tiene el propio BLP y aquellos que impone el Banco Central de la República Argentina. "Por ejemplo, tenemos que llegar con la fibra óptica y tiene que haber una comisaría cerca", señaló el gerente para ejemplificar dos requisitos ineludibles. "Hay que cumplir con factores técnicos y de seguridad".
El plan de obras para 2015 contempla la sede propia para la agencia de Casa de Gobierno y una importante ampliación a la agencia del Barrio Butaló. En el caso de Casa de Gobierno, el edificio estaría entre la Biblioteca Legislativa y la propia Casa de Gobierno. Esta obra es prioritaria por el nivel de operaciones que tiene en la actualidad.
En el barrio Butaló se prevén ampliaciones tanto edilicias como en la dotación de cajeros automáticos. Esta es otra sede que quedó chica ante el crecimiento de la ciudad y de la demanda de los clientes.
"Además estamos monitoreando permanentemente el crecimiento de la ciudad y la necesidad de abrir nuevas sucursales. Es algo que tenemos muy presente", remarcó.
-¿Podemos pensar en nuevas sucursales en los barrios nuevos de Santa Rosa?
-Si, totalmente, es una posibilidad. En Santa Rosa y en General Pico. Es un tema que está bajo constante análisis.
"Excelente resultado".
El sistema de cobro de servicios "Pampa Pagos" dio un excelente resultado y es otra fuerte línea de acción del Banco de La Pampa. "Vamos de a poco porque queremos hacer las cosas bien", explicó Faccipieri. La incorporación de nuevas bocas, tanto en Santa Rosa como en el interior, "es permanente" pero no masiva, aclaró. "Si abrís muchos y empieza a haber uno cerca del otro, no le conviene a nadie", señaló.
La intención es que cada barrio tenga un Pampa Pagos y lo mismo cada localidad. A la hora de buscar nuevas bocas, se presta atención a la cercanía con los ya existentes y a la estructura de empleados que ya tiene ese comercio. "Al comercio le queda una ganancia pero no alcanza para que contrate empleados solo para atender Pampa Pagos. Por eso buscamos comercios que ya tienen una estructura armada".
Este sistema es gerenciado por el Banco de la Provincia de Buenos Aires, Bapro, y consiste en una red que se amplía en forma constante en cuanto a bocas como a servicios. Para utilizar la red, el Banco de La Pampa le paga un porcentaje de cada transacción al Bapro. Otra parte queda para el comercio.
"El objetivo que se planteó el Banco de La Pampa cuando comenzamos con los Pampa Pagos no fue ganar dinero sino quedar hechos, porque lo que nos interesaba era descomprimir nuestras sucursales", indicó. La meta se ha cumplido con creces desde el momento en que de los 400.000 comprobantes mensuales que tiene el BLP, 100.000 se hacen por ventanilla y los 300.000 restantes se distribuyen entre los sistemas de Homebanking, Interbanking y Pampa Pagos.
La Arena
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