Santa Rosa | Con un auditorio colmado, Felipe Pigna disertó sobre "Fuerzas Armadas, Dictadura y Derechos Humanos".

MIRÁ LAS FOTOS Estuvo presente en el marco de la Semana de la Memoria y lo hizo ante un multitudinario marco de público. (Foto: EL Diario LP)

Invitado  por el Gobierno de la Provincia estuvo presente en el Centro Provincial de Cultura el reconocido historiador Felipe Pigna, quien ante un auditorio colmado y con asistentes de pie (más de 600 personas) ofreció una disertación, en el marco de la Semana de la Memoria.

Entre las autoridades presentes se encontraban el secretario de Derechos Humanos, Rubén Funes, el secretario de Asuntos Municipales, Fabián Bruna; el ministro de Salud, Mario González. el director de coordinación institucional de DD.HH., Oscar Gatica, y la subsecretaria de Cultura, Analía Cavallero.

Funes se expresó su beneplácito por la presencia del historiador y rápidamente le dio uso de la palabra a Felipe Pigna quien explicó que su alocución giraría sobre la trayectoria de José de San Martín y como fue utilizada su figura por los distintos golpes de Estado, y sobre la matriz represiva que se fue gestando desde la década del ‘60 y sus influencias en el golpe de 1976.

El escritor e historiador destacó que la figura de San Martín fue “utilizada y malversada”, y se construyó un “recorte” convirtiéndolo “estrictamente en un militar cuando en realidad fue una persona con múltiples intereses y un gran político, entre otras cosas”.

“La escritura de la idea de San Martín era hecha por los liberales que tenían un gran problema, les era muy difícil esconder la rivalidad entre San Martín y Rivadavia. Si hablamos de política, es inevitable diferenciar a estos personajes y esto se quieba en el 1910, con los festejos del Centenario, y se acentúa en el golpe del ‘30, cuando aparece el San Martín militar y una denominación muy significativa que es la de ‘padre de la Patria’, y así la Patria nace del Ejército. Ese es el discurso que se impone desde el ‘30 y se instala muy fuerte esa idea, que es -sin quitarle ningún mérito militar a San Martín- una idea equivocada y errónea”, señaló.

La denominada “matriz represiva de los ‘60”, según Pigna, es una “continuidad y un cambio de paradigma” de aquellas ideas de principios de siglo. “La revolución cubana modifica las hipótesis de conflicto, la resistencia peronista genera una gran dificultad a las autoridades de la (Revolución) Libertadora y recurren a los mayores expertos en represión que eran los franceses”, detalló.

Así, siguió recordando, se instaló en 1957 la Escuela Francesa en Buenos Aires en la Escuela Superior de Guerra, con uno de los más grandes expertos en contrainsurgencia que va a ser luego el instructor de los marines que pelearán en Vietnam. “La idea de enemigo interno que aparece en el ‘74 tiene ahí un antecendente, cuando aparece un discurso que se va a plasmar en las prácticas represivas de toda América Latina”, detalló.

Luego, identificó tres etapas en el país a partir de la recuperación de la democracia en 1983, marcadas por los gobiernos de Alfonsín, de Menem y de los Kirchner en adelante. “Hay más elementos de continuidad entre el primer alfonsinismo y el primer kirchnerismo. La década del ‘90 fue fatal en cuanto a derechos humanos: comienza con los indultos, la negativa a las extradiciones y a todo tipo de proceso judicial, la impunidad absoluta y la revalorización de todo lo hecho durante la dictadura. Martínez de Hoz me dijo que lo que no pudieron terminar ellos, lo terminaron en los ‘90”, advirtió.

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