En duro testimonio, presos dicen que no logran reinsertarse
https://www.lapampadiaxdia.com.ar/2015/04/en-duro-testimonio-presos-dicen-que-no.html
ESCUCHÁ EL AUDIO Son internos del penal cordobés de Bouwer. Carlos, uno de ellos dijo que se "sale peor y con rencor". Un detenido que es ciego contó que para bañarse debe gritarle a alguien desconocido para que lo lleve. (Foto Archivo: @diaadiacomar)
Dos reclusos de la cárcel de Bouwer contaron a Cadena 3 la dura experiencia por la que están pasando y manifestaron que no logran reinsertarse una vez en libertad.
“El sistema en que estamos es para reinsertarnos en la sociedad, para que entendamos las normas y pautas, pero no nos enseñan a convivir”, contó Carlos y sentenció: “Simplemente, nos encierran y nada más, no hay ningún estudio previo a salir en libertad”.
Desmintió, asimismo, que “todo lo que que dicen que las personas aprendan allí a estudiar y trabajar". "No es nada de eso”, señaló.
“Yo estoy por robo calificado hace un año. Ya tengo otras entradas. Volví a robar por adicción. Soy adicto. Entré a robar a un negocio estando drogado”, relató.
El hombre lamentó su situación, ya que dos veces intentó suicidarse cortándose las venas. “Tengo hijos, esposa, estoy en un estado de abandono. No quiero salir y seguir haciéndole daño a la gente”.
“Acá no aprendemos nada, no nos recuperamos. Se sale peor de lo que se entra. Se sale con rencor. La Justicia no nos da ninguna herramienta para salir e insertarnos a la sociedad”, resumió.
Alejandro Romero, por su parte, está preso hace un año por tenencia y comercialización de droga, y quedó ciego luego de una pelea en la calle.
Sostuvo que en la prisión no recibe ninguna asistencia por su condición de no vidente.
“Tengo que salir de la celda y gritarle a alguien desconocido que me lleve a bañar”, manifestó.
Cadena3
Dos reclusos de la cárcel de Bouwer contaron a Cadena 3 la dura experiencia por la que están pasando y manifestaron que no logran reinsertarse una vez en libertad.
“El sistema en que estamos es para reinsertarnos en la sociedad, para que entendamos las normas y pautas, pero no nos enseñan a convivir”, contó Carlos y sentenció: “Simplemente, nos encierran y nada más, no hay ningún estudio previo a salir en libertad”.
Desmintió, asimismo, que “todo lo que que dicen que las personas aprendan allí a estudiar y trabajar". "No es nada de eso”, señaló.
“Yo estoy por robo calificado hace un año. Ya tengo otras entradas. Volví a robar por adicción. Soy adicto. Entré a robar a un negocio estando drogado”, relató.
El hombre lamentó su situación, ya que dos veces intentó suicidarse cortándose las venas. “Tengo hijos, esposa, estoy en un estado de abandono. No quiero salir y seguir haciéndole daño a la gente”.
“Acá no aprendemos nada, no nos recuperamos. Se sale peor de lo que se entra. Se sale con rencor. La Justicia no nos da ninguna herramienta para salir e insertarnos a la sociedad”, resumió.
Alejandro Romero, por su parte, está preso hace un año por tenencia y comercialización de droga, y quedó ciego luego de una pelea en la calle.
Sostuvo que en la prisión no recibe ninguna asistencia por su condición de no vidente.
“Tengo que salir de la celda y gritarle a alguien desconocido que me lleve a bañar”, manifestó.
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