General Pico | Más de 2.000 personas marcharon contra la violencia de género
https://www.lapampadiaxdia.com.ar/2015/06/mas-de-2000-personas-marcharon-contra.html
La movilización, como en el resto del país, comenzó a las 17 horas en la Plaza San Martín donde algunas de las agrupaciones sociales convocantes dieron lectura a un documento. (Foto: El Diario LP)
Alrededor de 2.500 personas respondieron este miércoles a la convocatoria del “Ni una menos” en esta ciudad, convirtiéndose en una histórica movilización por el número de participantes. Hubo discursos, cánticos, marcha, pintadas y diversas expresiones contra la violencia hacia las mujeres.
Además, se escucharon duros mensajes contra las autoridades políticas locales por la falta de respuesta al refugio para mujeres: “tenemos los mismos derechos que los perros”, reclamaron las manifestantes ante el anuncio del Municipio sobre la nueva Canilera.
Militantes sociales, funcionarios y funcionarias políticos y judiciales, candidatos y candidatas, dirigentes de entidades intermedias, comerciantes, todos confluyeron en la movilización.
Pero en la multitud se destacó en gran número de mujeres jóvenes que salieron a la calle, como así también el de muchas madres de diversos barrios de la ciudad, que difícilmente participen de otros reclamos callejeros.
La movilización, como en el resto del país, comenzó a las 17 horas en la Plaza San Martín donde algunas de las agrupaciones sociales convocantes dieron lectura a un documento, para luego marchar por la zona céntrica de la ciudad.
Por calle 9 la agrupación feminista Guapabanda encabezó la marcha hacia Tribunales. Allí se escucharon mensajes contra el Poder Judicial “machista y patriarcal”. Luego de algunos minutos la columna que sobrepasaba las mil personas se trasladaron hasta el Concejo Deliberante, donde se expresaron los reclamos más duros.
Quienes estaban al frente de la movilización cuestionaron la “inacción” del recinto deliberativo y luego dirigieron su mensaje al intendente Juan José Rainone, quien participó de la marcha junto a varios funcionarios. “Tenemos los mismos derechos que los perros”, gritaron algunas de las manifestantes y explicaron que “está bien un refugio para animales, pero también las mujeres tienen derecho a un refugio”.
Tras sentar posición sobre las políticas locales, pintaron el frente del edificio del Concejo Deliberante con la leyenda “Refugio Ya!!!”.
La multitudinaria columna de manifestantes regresó luego hacia la Plaza San Martín, donde aguardaba un número similar, para dar pasó a mensajes de distintas mujeres. Allí se dirigieron a los presentes Adriana Longoni (por Patria Grande), Carina Ramella (Corriente Martin Fierro), jóvenes de La Cámpora y la escritora y candidata a intententa de Pico, Olga Reinoso. También habló la integrante de la Mesa de Políticas de Género, Alicia Campo, quien reconoció falencias y escasos recursos del Estado para la correcta aplicación de la ley 26.485.
En el cierre de la movilización participaron las “Tamboras del Viento” y el Movimiento por los Derechos de las Mujeres, que por razones laborales iniciaron su actividad a partir de las 19 horas.
El primero de los documentos leídos en la Plaza San Martín estuvo firmado por la Organización Feminista Guapabanda, Organización Estudiantil Nilda Masci, Movimiento de Trabajadores Desocupados, Movimiento Popular Patria Grande, CTA y Agrupación Docente Carlos Fuentealba.
Las agrupaciones señalaron que “este 3 de junio lo entendemos como un fruto de esas compañeras que vienen organizándose, poniéndole el cuerpo, empoderándose y rebelándose contra la misoginia espantosa que hace que miles de tipos ‘hijos sanos del patriarcado’ nos violen, nos maltraten, nos golpeen, nos insulten, nos denigren, nos manoseen, vendan y compren nuestros cuerpos...”.
Advirtieron que, además de participar de la marcha, “nos organizamos y ponemos el cuerpo para resistir a un poder judicial patriarcal, carente de perspectiva de género. Para denunciar la violencia institucional que se lleva a cabo en hospitales públicos, por empleados pagados por todos nosotros, que se resisten a realizar abortos no- punibles. Para manifestar que siguen existiendo organismos estatales con áreas de género, cuya labor debería ser garantizar la plena aplicación y cumplimiento de la ley 26.485, y que se caracterizan por la inoperancia, ineficiencia e incompetencia en estos temas...”.
En el orden local señalaron que “repudiamos también la violencia de los funcionarios estatales, como nuestros concejales, que hacen oídos sordos a los reclamos, y demandas urgentes de ciudadanas organizadas, frente a la necesidad de un refugio para mujeres golpeadas”.
Remarcaron también que “sigue vigente aun la violencia por parte del aparato represor del estado (la policía) que frente a situaciones de violencia de género, actúa reforzando y reproduciendo humillaciones hacia las mujeres que llegan a denunciar situaciones de abusos o golpes”.
Y finalmente queremos repudiaron “a los hipócritas y demagogos que siendo responsables políticos de estas múltiples violencias, adhieren a la marcha NI UNA MENOS, para disimular su culpabilidad”.
Por su parte, “Tamboras del Viento” y el Movimiento por los Derechos de las Mujeres recordaron en su documento que “ambas organizaciones desde hace años vienen denunciando el machismo en la sociedad, en las estructuras del estado, en la Justicia, en la Educación, en los órganos de gobierno y de legislación. Por eso invitan a ir más allás del ‘selfie compromiso’, esto es, un compromiso facebuquero, ligth, no comprometido seriamente con la problemática que se intenta visibilizar, una militancia a la carta, sin contenido ideológico”.
Y se preguntaron “¿Qué significa ni una menos? ¿Cuáles muertes son las que socialmente vamos a llorar? ¿Sólo la de las mujeres en el marco familiar o de la violencia de género? ¿”Ni una menos” no incluiría también las mujeres pobres muertas por ilegalidad del aborto? ¿No incluiría también la violencia machista que Tinelli, con casi 40 puntos de rating ejerce en su programa? ¿No incluye también la violencia verbal de los comentarios de Miguel del Sel, apoyado por el treinta y pico por cierto de los santafecinos? ¿Y los chistes que se cuelan en el humor cordobés? ¿Y las expresiones misóginas contra la presidenta o contra cualquier política que, en vez de pegarle políticamente se utiliza su condición de mujer para agredirla?”.
Y resumieron que “’Ni una menos’ nos compromete, más allá de la fotito, a pensar y militar por una sociedad más justa, donde todas las muertes sean lloradas, o más radical aún, donde todas las vidas tengan el mismo valor”.
El Diario LP
Alrededor de 2.500 personas respondieron este miércoles a la convocatoria del “Ni una menos” en esta ciudad, convirtiéndose en una histórica movilización por el número de participantes. Hubo discursos, cánticos, marcha, pintadas y diversas expresiones contra la violencia hacia las mujeres.
Además, se escucharon duros mensajes contra las autoridades políticas locales por la falta de respuesta al refugio para mujeres: “tenemos los mismos derechos que los perros”, reclamaron las manifestantes ante el anuncio del Municipio sobre la nueva Canilera.
Militantes sociales, funcionarios y funcionarias políticos y judiciales, candidatos y candidatas, dirigentes de entidades intermedias, comerciantes, todos confluyeron en la movilización.
Pero en la multitud se destacó en gran número de mujeres jóvenes que salieron a la calle, como así también el de muchas madres de diversos barrios de la ciudad, que difícilmente participen de otros reclamos callejeros.
La movilización, como en el resto del país, comenzó a las 17 horas en la Plaza San Martín donde algunas de las agrupaciones sociales convocantes dieron lectura a un documento, para luego marchar por la zona céntrica de la ciudad.
Por calle 9 la agrupación feminista Guapabanda encabezó la marcha hacia Tribunales. Allí se escucharon mensajes contra el Poder Judicial “machista y patriarcal”. Luego de algunos minutos la columna que sobrepasaba las mil personas se trasladaron hasta el Concejo Deliberante, donde se expresaron los reclamos más duros.
Quienes estaban al frente de la movilización cuestionaron la “inacción” del recinto deliberativo y luego dirigieron su mensaje al intendente Juan José Rainone, quien participó de la marcha junto a varios funcionarios. “Tenemos los mismos derechos que los perros”, gritaron algunas de las manifestantes y explicaron que “está bien un refugio para animales, pero también las mujeres tienen derecho a un refugio”.
Tras sentar posición sobre las políticas locales, pintaron el frente del edificio del Concejo Deliberante con la leyenda “Refugio Ya!!!”.
La multitudinaria columna de manifestantes regresó luego hacia la Plaza San Martín, donde aguardaba un número similar, para dar pasó a mensajes de distintas mujeres. Allí se dirigieron a los presentes Adriana Longoni (por Patria Grande), Carina Ramella (Corriente Martin Fierro), jóvenes de La Cámpora y la escritora y candidata a intententa de Pico, Olga Reinoso. También habló la integrante de la Mesa de Políticas de Género, Alicia Campo, quien reconoció falencias y escasos recursos del Estado para la correcta aplicación de la ley 26.485.
En el cierre de la movilización participaron las “Tamboras del Viento” y el Movimiento por los Derechos de las Mujeres, que por razones laborales iniciaron su actividad a partir de las 19 horas.
Documentos
El primero de los documentos leídos en la Plaza San Martín estuvo firmado por la Organización Feminista Guapabanda, Organización Estudiantil Nilda Masci, Movimiento de Trabajadores Desocupados, Movimiento Popular Patria Grande, CTA y Agrupación Docente Carlos Fuentealba.
Las agrupaciones señalaron que “este 3 de junio lo entendemos como un fruto de esas compañeras que vienen organizándose, poniéndole el cuerpo, empoderándose y rebelándose contra la misoginia espantosa que hace que miles de tipos ‘hijos sanos del patriarcado’ nos violen, nos maltraten, nos golpeen, nos insulten, nos denigren, nos manoseen, vendan y compren nuestros cuerpos...”.
Advirtieron que, además de participar de la marcha, “nos organizamos y ponemos el cuerpo para resistir a un poder judicial patriarcal, carente de perspectiva de género. Para denunciar la violencia institucional que se lleva a cabo en hospitales públicos, por empleados pagados por todos nosotros, que se resisten a realizar abortos no- punibles. Para manifestar que siguen existiendo organismos estatales con áreas de género, cuya labor debería ser garantizar la plena aplicación y cumplimiento de la ley 26.485, y que se caracterizan por la inoperancia, ineficiencia e incompetencia en estos temas...”.
En el orden local señalaron que “repudiamos también la violencia de los funcionarios estatales, como nuestros concejales, que hacen oídos sordos a los reclamos, y demandas urgentes de ciudadanas organizadas, frente a la necesidad de un refugio para mujeres golpeadas”.
Remarcaron también que “sigue vigente aun la violencia por parte del aparato represor del estado (la policía) que frente a situaciones de violencia de género, actúa reforzando y reproduciendo humillaciones hacia las mujeres que llegan a denunciar situaciones de abusos o golpes”.
Y finalmente queremos repudiaron “a los hipócritas y demagogos que siendo responsables políticos de estas múltiples violencias, adhieren a la marcha NI UNA MENOS, para disimular su culpabilidad”.
Tamboras
Por su parte, “Tamboras del Viento” y el Movimiento por los Derechos de las Mujeres recordaron en su documento que “ambas organizaciones desde hace años vienen denunciando el machismo en la sociedad, en las estructuras del estado, en la Justicia, en la Educación, en los órganos de gobierno y de legislación. Por eso invitan a ir más allás del ‘selfie compromiso’, esto es, un compromiso facebuquero, ligth, no comprometido seriamente con la problemática que se intenta visibilizar, una militancia a la carta, sin contenido ideológico”.
Y se preguntaron “¿Qué significa ni una menos? ¿Cuáles muertes son las que socialmente vamos a llorar? ¿Sólo la de las mujeres en el marco familiar o de la violencia de género? ¿”Ni una menos” no incluiría también las mujeres pobres muertas por ilegalidad del aborto? ¿No incluiría también la violencia machista que Tinelli, con casi 40 puntos de rating ejerce en su programa? ¿No incluye también la violencia verbal de los comentarios de Miguel del Sel, apoyado por el treinta y pico por cierto de los santafecinos? ¿Y los chistes que se cuelan en el humor cordobés? ¿Y las expresiones misóginas contra la presidenta o contra cualquier política que, en vez de pegarle políticamente se utiliza su condición de mujer para agredirla?”.
Y resumieron que “’Ni una menos’ nos compromete, más allá de la fotito, a pensar y militar por una sociedad más justa, donde todas las muertes sean lloradas, o más radical aún, donde todas las vidas tengan el mismo valor”.
El Diario LP
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