Santa Rosa | Una multitud marchó con la consigna "Ni una menos"

Miles de personas se reunieron este miércoles en la Plaza San Martín. Marcharon a Casa de Gobierno. Manifestación contra la violencia de género que se realiza en simultáneo en todo el país. (Foto: El DIario LP)

Mujeres, hombres, niños y niñas se concentraron en la plaza San Martín de Santa Rosa para decirle basta a la violencia de género. También hubo movilizaciones en General Pico, General Acha, Realicó, Quemú Quemú y Catriló.

 

Una multitud cercana a las 10 mil personas marchó, por la avenida San Martín desde la plaza hacia Casa de Gobierno. Fue una de las manifestaciones más grandes que se recuerde en la capital provincial, compuesta además por una participación multicolor y heterogénea, una muchedumbre de todas las edades y clases sociales y diversas pertenencias.

Hubo de todo: desde participación genuina de referentes que desde hace años trabajan la problemática de la violencia de género hasta oportunistas que no quisieron perderse el impacto de una movilización nacional que genera impacto, que conmovió a las masas y hasta se convirtió en moda. Estuvieron altos referentes del poder político y del Poder Judicial, justamente destinatarios de las demandas de los convocantes.

En Santa Rosa estuvieron -entre otras caras visibles- la vicegobernadora Norma Durango, el intendente Luis Larrañaga -cuya gestión viene soportando severos cuestionamientos relacionados justamente con la falta de políticas para atender estas cuestiones-, la diputada Sandra Fonseca (esposa del condenado Juan Carlos Tierno) y hasta el policía Julián Jiménez, cabecilla de los efectivos que protagonizaron la sedición del 10 de diciembre de 2013.

Hubo notable participación y presencia de agrupaciones políticas y organizaciones no gubernamentales, que convivieron en paz en la multitud, sin necesidad de intervención policial de ningún tipo (ni siquiera hubo responsables de cortar y controlar el tránsito). Banderas, globos, bombos, tamboriles, murgas y disfraces le dieron color y ánimo al encuentro: por momentos, la movilización hizo acordar al verano de 2008, cuando una movilización popular semanal influyó para que se interviniera la Municipalidad de Santa Rosa. Entre los presentes se hizo imposible evitar la comparación con aquellas multitudes, y en general hubo coincidencia en que posiblemente este histórico miércoles 3 de junio hubo mayor concurrencia que en aquellos viernes de verano.

La concentración fue en la Plaza San Martín y se hizo una marcha hasta Casa de Gobierno. La movilización resultó impactante y por momentos conmovedora. Al margen de unos pocos automovilistas intolerantes y apurados que hicieron sentir su descontento con el tránsito entorpecido, hubo una respuesta positiva de quienes no se sumaron directamente a la marcha por cuestiones de trabajo: los comerciantes sumaron, en general, su adhesión con aplausos y otras formas de aval.

El recorrido por la Avenida San Martín se extendió por más de 7 cuadras. Se llegó hasta el corazón del Centro Cívico y se regresó por la misma calle principal de la ciudad.

La sociedad pampeana está sacudida por los ataques a Angelina Baiotti y a Patricia Sclavuno. Las ONG, organizaciones políticas y entidades intermedias se sumaron hoy a la convocatoria nacional “Ni una menos” contra la violencia de género.  Una actividad similar se realiza en General Pico y otras localidades.

 

 

Foto: Facebook

La convocatoria nacional surgió en las redes sociales después del asesinato de Chiara Páez, la adolescente de 16 años brutalmente asesinada en Rufino y enterrada en el patio de la familia de un novio. Ese crimen conmovió primero a las luchadoras por las políticas de género y a las feministas y después a la opinión pública. Ese llamado inicial utilizando las redes sociales, Facebook y Twitter, se viralizó desatando una bola de nieve que instaló el reclamo en la agenda política. Se espera una convocatoria numerosa en la Plaza de los Dos Congresos, en la ciudad de Buenos Aires, y en 100 ciudades del país.

En Santa Rosa y en General Pico el lugar de encuentro fue en la plaza San Martín de cada ciudad. En el Movimiento de Derechos por las Mujeres y Tamboras del Viento expresaron su adhesión a la convocatoria.

La adhesión se cristalizó a través de las redes sociales con un foto y el cartel de “Ni una menos”.

En la capital provincial hubo diferente tipo de adhesión. En Facebook, alrededor del 16 de mayo, se lanzó la página “Ni una menos La Pampa”. Los primeros en sumarse fueron organizaciones sociales. Hubo además adhesiones personales, como la de la exdirectora de Políticas de Género de la Municipalidad santarroseña, la periodista Mónica Molina. En el CREAR (Centro Regional de Artes) también respondieron al llamado, creando su propia convocatoria. Además, realizaron actividades didácticas y pedagógicas, junto a la confección de banderas y carteles para la marcha.

Hubo familiares de víctimas que sumaron su adhesión. Es el caso de Guillermina Forte, muerta en un siniestro vial cuando el auto en que viajaba se estrelló contra un camión hace 9 meses en la ruta 35: su madre Marcela Fernández Ferrero denunció que el exnovio se la llevó y la secuestró en los momentos previos a ese choque frontal.

Después se sumaron otras adhesiones como el caso de la Universidad Nacional de La Pampa, del INADI La Pampa, UTELPa, de la Municipalidad de Santa Rosa a través de la Dirección de Políticas de Género, la CTA Autónoma. También el candidato a gobernador Fabián Bruna se sacó una foto con un gran número de integrantes de su campaña.

La adhesión de funcionarios con responsabilidad política y de organismos oficiales desató la reacción de algunos militantes de la temática. Por ejemplo, la directora de Políticas de Género, Fabiana Montañez, fue cuestionada en el abordaje de la situación de una mujer víctima de violencia, que escapó de su pareja y ocupó una vivienda. Pero fue desalojada sin asistencia de los organismos oficiales.

La CTA autónoma desafió la adhesión de los funcionarios y de quienes tienen responsabilidades políticas. La Secretaría de Prensa difundió un eslogan: “Tu política de género las mata”.

Foto: El Diario LP

Una víctima presente

También está presente Patricia Sclavuno, la mujer que fue atacada por el empresario Roberto Gallinger hace pocos días. El agresor la roció con nafta e intentó prenderla fuego, después de una discusión: la mujer, que fue golpeada y tirada al piso, logró levantarse y huir. A su espalda vio una llamarada: el pasto del patio quedó quemado. Sclavuno difundió su caso por Facebook diciendo que no quería ser “una menos”. Gallinger, quien salió libre luego de muchos incidentes de violencia, permanece detenido.

La sociedad pampeana arrastra además conmocionantes casos de violencia de género. Uno de los más escandalosos fue la muerte de Carla Figueroa, quien fue víctima de una violación por su pareja, Marcelo Tomaselli. Pero los jueces le otorgaron el advenimiento, el perdón luego del casamiento. Eso fue el salvoconducto para que Tomaselli saliera de la cárcel. Una semana después, el 10 de diciembre de 2011, la mató. Esa muerte determinó el cambio del Código Penal que permitía al advenimiento.

Ahora, las organizaciones sociales reclaman políticas de atención a la víctima de violencia y medidas concretas que prevengan otras muertes.

El Diario LP