Santa Rosa | Diarco prometió solucionar los incumplimientos y el CEC levantó la medida de fuerza

Dirigentes del Centro Empleados de Comercio y empresarios de Diarco llegaron a un acuerdo en una audiencia de conciliación en la Dirección de Relaciones Laborales de Santa Rosa. La empresa se comprometió a mejorar las condiciones laborales. (Foto: iTextual)

Esta audiencia fue convocada luego de los dos días de bloqueo a los accedos del mayorista Diarco, en el cruce de las colectoras de las avenidas Luro y circunvalación Santiago Marzo.

El apoderado legal de la firma mayorista Diarco, Martín Matzkin, y el representantes de los trabajadores, el gremialista del CEC, Rodrigo Genoni, firmaron un acuerdo este martes por la mañana en la Dirección de Relaciones Laborales, y de esa forma se levantó la medida de fuerza que se había iniciado el jueves de la semana pasada por incumplimientos de las normas de seguridad e higiene en la sucursal ubicada en Cirvunvalación y Luro. Alejandro Lago

La empresa se comprometió a entregarle ropa a los empleados y mejorar las condiciones de higiene, comodidades del lugar, norma de seguridad, entre otros, en el término de dos semanas.

Quedaron pendientes acordar otros puntos como la incorporación de un vehículo elevador y abrir entre cuatro y cinco puestos de trabajo. Una nueva reunión, para tratar esos dos puntos, quedó prevista para dentro de dos meses.

La reunión duró un poco más de una hora. "No era ilógico lo que pedíamos. Van a cumplir. Van a comprar siete zorras, una por mes. Van a recargar los matafuegos. Van a comprar sillas. A marzo van a cambiar el sistema de facturación. La reunión fue positiva", dijo Genoni, a la salida.

La compra del zamping quedó pendiente porque la empresa aduce que el costo es alto, 300 mil pesos. También la incorporación de cuatro empleados. "Se necesitan refuerzos porque sino van a terminar con licencias por enfermedad por la sobrecarga de tareas", señaló el sindicalista.

Genoni explicó que "para mantener la paz social, se firmó no tomar ningún tipo de medida de fuerza y que la empresa no tome represalias ni contra los trabajadores ni contra los dirigentes gremiales".

"Es lo mismo que yo dije un año atrás. Que se necesitaba diálogo. Siempre lo vna a encontrar. Pero lo que pedimos es que se cumpla la normativa laboral, no hay otra negociación posible. No hay posibilidad, que cumplan y dialogamos en función de eso. No hay otra posibilidad", insistió.

Genoni contò que hay dos expedientes iniciados por el organismo laboral, en los que constan los incumplimientos de la emrpesa, de julio de este año. "El apoderado reconoció todo lo que se pedía", dijo.

Por otra parte, aclaró: "No me parece que haya sido efectiva la medida. Ha sido lamentable. Nunca voy a decir que tuvo buen resultado. Siempre es negativa porque quiere decir que no se priorizó el diálogo".

"La empresa tuvo tiempo de arreglar las cosas. Yo vengo pidiéndoles dialogar hace más de un año", apuntó. De todos modos, Genoni contó que la audiencia se desarrolló en un tano conciliador. "Uno sabe cuando está en falta y cuando se equivocó. Estamos hablando de una gran empesa", indicó.

De esta manera, se destrabó el conflicto laboral desatado el jueves de la semana pasada en la sucursal local de la empresa Autoservicio Mayorista Diarco S.A. Los trabajadores decidieron levantar la protesta el viernes pasado, en procura de llegar a un acuerdo con la patronal. Así fue como la medida de fuerza entró en un compás de espera hasta este martes, para ver qué resulta de la conciliación.

El autoservicio mayorista volvió a abrir sus puertas desde el sábado. Genoni destacó que uno de los gerentes locales de la empresa, Alejandro Falconi, actuó como “nexo y mediador” entre los trabajadores y la gerencia de Buenos Aires.

La protesta había comenzado el jueves en el cruce de las avenidas Luro y Circunvalación Santiago Marzo, frente al comercio mayorista. Genoni había dicho que había 40 trabajadores dentro del autoservicio y unos 60 manifestantes en el piquete, fuera del edificio.

Originalmente, la protesta había nacido por tiempo indeterminado. El abogado de la empresa, Martín Matzkin, mantuvo algún contacto con los gremialistas en las primeras horas pero no pudieron llegar a un acuerdo.

Desde principios de este año el gremio venía advirtiendo sobre situaciones irregulares que sufrían los trabajadores a la hora de la contraprestación laboral. Hubo una audiencia conciliatoria en agosto, pero la empresa no cumplió con las exigencias. El Sindicato se había declarado en alerta y movilización hace unos días.

“Está en riesgo la salud de los trabajadores ante la falta de ropa de trabajo, de remeras, pantalones, borcegos, fajas de seguridad, sampings, zorras, condiciones eléctricas, matafuegos, camperas para el invierno, refrigerios o descansos. Incluso, en lo que hace a limpieza, hay un solo trabajador, cuando debería haber un mínimo de tres. Esto hace que se recargue a los trabajadores en la cuestión física, que termina luego en lesiones o hernia de disco”, describió el gremio al lanzar la protesta. 

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