Provinciales | Tres nuevos incendios en el sur provincial
https://www.lapampadiaxdia.com.ar/2016/01/provinciales-tres-nuevos-incendios-en.html
Tres nuevos incendios están devastando más de tres mil hectáreas de bosque nativo pampeano. Los focos, que se encuentran ubicados en el sur provincial, se desataron este martes a raíz de una tormenta eléctrica. "Están contenidos y en guardia de cenizas", dijo el director de Defensa Civil, Gustavo Romero. (Foto Arch.: Gob.LP)
Uno de los siniestros, que consumió mil quinientas hectáreas, se encuentra al norte del Carancho. Allí trabajan brigadistas de la base de Chacharramendi.
Otro fuego quemó mil hectáreas a la altura del cruce de las rutas provinciales 11 y 24, al suroeste de General Acha. Mientras que el restante, donde ardieron ochocientas hectáreas de monte, está situado en la intersección de las rutas 35 y 154, camino a La Adela.
La temporada con abundantes precipitaciones empastó los campos, una situación que multiplicó los riesgos de incendios. "El pastizal es el combustible para la propagación de las llamas y dificulta todo", reconoció el funcionario.
Explicó que el fenómeno climático al que está asistiendo La Pampa le permite suponer que la época más riesgosa de la temporada se vivirá en febrero y no en enero, como ocurrió históricamente. "En febrero, una vez que se seque el pasto y deje de llover, tendremos muchos fuegos", infirió.
En la que va de la temporada -para los incendios se toma desde el 1 de noviembre al 31 de marzo- se registraron veintiocho siniestros que dejaron un saldo de más de 39 mil hectáreas quemadas. El setenta y ocho por ciento obedeció a factores climáticos.
Uno de los siniestros, que consumió mil quinientas hectáreas, se encuentra al norte del Carancho. Allí trabajan brigadistas de la base de Chacharramendi.
Otro fuego quemó mil hectáreas a la altura del cruce de las rutas provinciales 11 y 24, al suroeste de General Acha. Mientras que el restante, donde ardieron ochocientas hectáreas de monte, está situado en la intersección de las rutas 35 y 154, camino a La Adela.
La temporada con abundantes precipitaciones empastó los campos, una situación que multiplicó los riesgos de incendios. "El pastizal es el combustible para la propagación de las llamas y dificulta todo", reconoció el funcionario.
Explicó que el fenómeno climático al que está asistiendo La Pampa le permite suponer que la época más riesgosa de la temporada se vivirá en febrero y no en enero, como ocurrió históricamente. "En febrero, una vez que se seque el pasto y deje de llover, tendremos muchos fuegos", infirió.
En la que va de la temporada -para los incendios se toma desde el 1 de noviembre al 31 de marzo- se registraron veintiocho siniestros que dejaron un saldo de más de 39 mil hectáreas quemadas. El setenta y ocho por ciento obedeció a factores climáticos.
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