La defensa de De Vido apunta ahora a la prisión domiciliaria
Foto: WEB |
La estrategia a la que apunta el letrado tiene que ver con la enfermedad que padece De Vido: el ex funcionario es insulino dependiente y por ello requiere cuidados especiales.
Rusconi es el abogado de De Vido desde el 21 de septiembre, luego de que renunciaran sus históricos defensores Adrián Maloneay y Julio Virgolini.
El letrado fue fiscal y docente de la Universidad de Buenos Aires, defendió a Carlos Menem –en el proceso por el contrabando de armas–, a Diego Lagomarsino –en la causa por la muerte del fiscal Alberto Nisman–, a Andrés Galera, sindicado como presunto "valijero" de la obra pública; y a Lázaro Báez, otro de los presos de la era kirchnerista.
Rusconi utilizó la misma estrategia con Báez quien también padece de diabetes, aunque no tuvo éxito porque la Justicia consideró que en el Hospital de Ezeiza puede ser atendido y no necesita estar en su casa.
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