#SantaRosa | Asaltaron y golpearon a una mujer: la dejaron en coma
https://www.lapampadiaxdia.com.ar/2018/11/santarosa-asaltaron-y-golpearon-una.html
Foto: iTextual |
Una mujer jubilada fue asaltada y golpeada en su cabeza en su casa de Santa Rosa y tuvo que ser internada en el Hospital Molas. Está en grave estado: fuentes de la causa informaron que estaba en coma farmacológico.
El ataque ocurrió en un departamento sobre la calle Garibaldi, entre España y O’higigins, en el barrio Calfucurá.
Los investigadores confirmaron que no faltó dinero ni otros objetos de valor que había en el domicilio.
La mujer, de nombre Felisa Acevedo, vive sola. Estuvo varias horas inconsciente (se estima que durante dos días), hasta que el viernes a la tarde familiares concurrieron a su vivienda.
Por la noche del viernes fue trasladada al Molas.
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La mujer podría haber estado dos días inconsciente
Según lo estimaron fuentes de la investigación y familiares, Felisa Acevedo, la jubilada de 86 años de edad que fue golpeada en su departamento del barrio Calfucurá, estuvo unos dos días inconsciente.
La mujer -que fue hallada en el comedor, desmayada en el suelo, con un golpe en la cabeza- se encuentra en coma farmacológica. El o los delincuentes revolvieron el lugar, pero no se llevaron ni dinero ni objetos de valor.
La fiscal Yanina Mansi dijo que la mujer fue encontrada el viernes a la noche. “Podría haber estado desmayada desde el miércoles. Tiene un fuerte golpe en la cabeza”, dijo. Le habrían pegado con un hierro.
La puerta de acceso no se encontraba rota. El departamento estaba revuelto, pero los investigadores confirmaron a este diario digital que no faltó dinero ni otros objetos de valor que había en la casa.
Felisa -quien permanece internada en el Hospital Molas - es escritora y jubilada. Su hija es Nilda “Paty” Redondo, docente y escritora. “Está muy grave”, contó.
Dijo que el jueves pasó a visitarla. “Toqué la puerta y nadie abrió. Pensé que había salido”, dijo.
El viernes a la noche la nieta de Felisa, Jimena Cabello, también pasó por el departamento. “Le pareció raro y miró por la rendija de las cartas. Vio que su abuela estaba caída”, dijo Redondo.
iTextual