Los Caballeros de la Quema volvieron a tocar ante su público

Foto: WEB

La banda liderada por Iván Noble renovó los votos ante 6.500 personas en el microestadio Malvinas Argentinas, donde interpretaron una veintena de hits y dejaron la puerta abierta para otro regreso.

La banda Caballeros de la Quema conquistó este sábado a unas 6.500 almas con un intenso show en el que recorrió más de una veintena de clásicos inoxidables en el estadio Malvinas Argentinas, donde concretó el regreso al escenario tras un año del exitoso recital que ofreció en Mar del Plata.

Iván Noble, los guitarristas Pablo Guerra y Martín Méndez, el bajista Patricio Castillo y el baterista Javier "Nene" Cavo tocaron por última vez el 22 de julio de 2018 en Parque Camet frente a 30.000 espectadores y previo a ello, el 23 de junio de 2017 en el festival Provincia Emergente que se realizó en el estadio Único, donde esperaron por ellos cerca de 25.000 personas.

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A un día de cumplirse dos años de la fecha que el grupo de Morón eligió para reencontrarse con su público luego de 15 de inactividad (los Caballeros de la Quema se separaron en 2002), el quinteto volvió al escenario para demostrar que ni el tiempo ni la lejanía hicieron estragos en ellos.

El público, por su parte, tampoco dejó que la distancia resquebraje el vínculo con la banda, pero esas personas que dos décadas atrás iban a verla con amigos, este sábado se encontraron frente a ella acompañados también de sus hijos y -en algunos casos- nietos; generaciones que por primera vez la escucharon en vivo.

El show arrancó solo unos minutos más tarde de lo pactado, se apagaron las luces y un cronómetro naranja iluminó la pantalla del escenario: cinco minutos separaban al estadio repleto de los Caballeros de la Quema y la cuenta regresiva era inversamente proporcional a la expectativa de la gente, que entonaba a viva voz los últimos segundos.

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Los acordes de "Volver", de Carlos Gardel, y una serie de fotos que fueron recreando la trayectoria de la banda desde su inicio en 1989, oficiaron de antesala de un recital que duró dos horas y media y que atravesó más de una veintena de canciones.

Los músicos estrenaron la noche con "Celofán" y siguieron, sin mediar palabra, con "Huelga de princesas" y "Todos atrás y Dios de 9".

"Buenas noches, monada, qué lindos están. Va a ser una noche larga, ojalá la disfruten", se presentó Noble y dio paso a más clásicos ("Patri", "¿Qué pasa en el barrio?", "Cero mensaje en el contestador") antes de hacer una suerte de sociograma del público: varios fueron a Cemento y al Luna pero no muchos a Obras ni a Parque Sarmiento; un tercio de los espectadores tenía menos de 30 años, un poco más entre 40 y 50, y el resto se repartía entre 30 y 40 y arriba de las cinco décadas.

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La complicidad asomó con "No chamuyes", "Rajá rata", "A sangre fría", "Primavera negra" (acompañada de fotos de Madres de Plaza de Mayo, de movilizaciones y represiones) y "Basta para mí", una canción compuesta "en el 99 pero que podría haber sido escrito la semana pasada", manifestó en vocalista, tras un intento fallido que generó risas tanto arriba como debajo del escenario.

También tuvieron su lugar baladas como "Sapo de otro pozo" y "Otro jueves cobarde"; junto al bandoneonista Marco Antonio, regalaron unas estrofas de "Stand by me" (Ben E. King) e interpretaron "Fulanos de nadie"; y la despedida, además de un bis con "Pejerrey" y "Oxidado", dejó una puerta entreabierta: "Muchísimas gracias, quién sabe, hasta luego", esbozó Noble.

Cadena3